La movilidad de determinados vehículos está más regulada que nunca… y en Madrid saben perfectamente de lo que estamos hablando, por supuesto. Los problemas que está teniendo nuestra Tierra para evitar males ocasionados por el mal estado del medioambiente son muy grandes y está claro que se debe tener en consideración cualquier cosa que pueda ayudar a cambiar las cosas. La contaminación que provocan los vehículos que funcionan con gasolina o diésel es más que evidente y eso es lo que hace que muchas ciudades tengan esa boina de contaminación tan característica y tan dañina.
Sin embargo, no solo está controlada o limitada la movilidad de los coches en determinadas ciudades. También está bastante controlado el asunto limitado al aparcamiento. Es evidente que en muchos barrios de Madrid es bastante complicado aparcar y más si venimos desde fuera. Hay muchísimas plazas de aparcamiento que están reservadas por Ley a los residentes y eso, para quien visita Madrid, hace inevitable que se tenga que buscar un parking especial para intentar dejar nuestro coche y tener la tranquilidad de que vamos a estar relativamente cerca del lugar al que queremos ir. Mucha gente considera eso un auténtico lujo.
Según una noticia publicada en la web de La Información, hay un millón de coches que entra a diario a Madrid. Eso explica que exista una serie de atascos todos los días laborables para acceder a la capital de España. En las siete autopistas que nacen en la ciudad existen retenciones y es evidente que eso muestra la relevancia que adquiere una ciudad como esta, que siempre ha sido clave en todos los aspectos económicos de nuestro país. Eso, entre otras cosas, implica que existan tantos vehículos rodando por una ciudad como de la que estamos hablando.
La misma noticia indica que ya no es que solamente entre un millón de vehículos en Madrid cada día, sino que por la ciudad se mueven dos millones y medio de ellos. Si tenemos en consideración que el espacio destinado para las plazas de aparcamiento es limitado, resulta evidente que debe existir un control sobre ellas. Y eso es lo que lleva a que existan plazas para los residentes por Ley. ¿Qué es cierto que eso limita las opciones de aparcar de la gente que no vive en Madrid pero que visita la ciudad? Exacto. Pero eso no quiere decir que no haya otras opciones para aparcar.
Ya conocemos cómo es la normativa relativa al aparcamiento en determinados puntos céntricos de la ciudad de Madrid y lo limitada que puede llegar a estar esa acción. Los parkings, tan importantes en la vida diaria de la ciudad, han adquirido una importancia mucho más grande en la actualidad. En Orbit Parking han venido identificando un aumento del número de visitantes que reciben sus instalaciones a medida que la normativa se ha ido endureciendo en relación al aparcamiento de vehículos en las calles del centro de Madrid.
Esto no quiere decir que estemos en contra de la limitación de la movilidad
Nos parece lógico que las instituciones estén preocupadas por el cuidado del medioambiente y que focalicen su atención en la circulación de los vehículos en las grandes ciudades como Madrid. Es una necesidad imperiosa de nuestra sociedad y no cabe la menor duda de que hay que hacer todo lo posible para tratar de mejorar el estado de contaminación en el que se encuentra no solo Madrid, sino otras grandes ciudades de nuestro país y europeas. Luchar contra la degradación del medioambiente es algo que nos corresponde a todos y todas y que hay que considerar como relevante.
La movilidad de determinados vehículos hay que limitarla y, en ciudades como Madrid, hay que promover que los residentes tengan la posibilidad de tener determinadas plazas para aparcar cerca de su casa. Esto hace que los parkings sean necesarios y que jueguen un papel muy importante para toda esa gente que acuda a ciudades como Madrid para cualquier cosa. La facilidad de aparcamiento que existe en ellos, la comodidad y la seguridad que proporcionan lugares como estos son muy grandes y es lógico que sean muchas las personas que hayan depositado su confianza en ella.
El futuro nos conduce a situaciones como estas. Ojalá que todo el mundo sea consciente de lo importante que resulta el hecho de cuidar de nuestra atmósfera y de las diferentes maneras que tenemos de hacerlo. Debe parecernos lógico que haya una legislación dedicada a este asunto. De lo contrario, sería mucho más complicado lograr los objetivos a nivel de sostenibilidad para los próximos años. La calidad de vida de las generaciones que van a venir depende de esto y no les podemos fallar. Sería una carga demasiado grande para nosotros y nosotras.